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Las ollas de cobre eran ampliamente utilizadas por nuestras abuelas, pero su uso se ha ido abandonado, a pesar de que tiene ventajas apreciables.
Las ollas de cobre se caracterizan por ser más caras y complicadas de mantener que las actuales ollas de aluminio o de acero. Pero las ollas de cobre, sin embargo, le dan a los guisos un sabor especial que nos hace rememorar los sabores tradicionales de los platos guisados en ollas de cobre.
¿Por qué saben diferente los platos que han sido cocinados en ollas de cobre? . Se debe a que el cobre es un material que es un excelente conductor del calor, y ello hace que el calor se reparta de modo uniforme por toda la olla al calentar la comida, sin originarse unas zonas donde se calienta más y otrasdonde se calienta menos.
¿Que ventajas presenta el cocinar en olla de cobre?
El cobre libera iones de cobre a la comida en una cantidad que es insuficiente para generar efectos nocivos, pero a su vez es suficiente para tener efecto bactericida sobre los alimentos, lo cual nos evitará muchas intoxicaciones alimentarias.
El reparto uniforme del calor que se produce en la olla de cobre es la causa de que la comida no se pegue al fondo de la olla.
La posibilidad de intoxicarse con el cobre es practicamente imposible, puesto que si se crearan derivados tóxicos de cobre, se ven a simple vista, debido a que crean una capa de color verde y, por tanto, si la olla se ve de color verde es mejor no usarla.
Mantenimiento de las ollas de cobre
El mantenimiento consiste en frotar la olla, con la ayuda de un paño de algodón, con una mezcla hecha con zumo de limón, vinagre caliente y una cucharadita sopera de sal fina.
Ésto mantiene la olla de cobre libre de oxidaciones, algo fácil de observar debido a que no le aparecen manchas verdosas.
Precauciones especiales a tener en cuenta
Las personas afectadas por la enfermedad de Wilson, la cual se caracteriza por una excesiva acumulación de cobre en el organismo, no deben comer nada cocinado en una olla de cobre
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