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Lengua quemada no degusta nada

En numerosas ocasiones debido a un exceso de impaciencia por comenzar a comer, o por simple despiste, nos metemos en la boca comida excesivamente caliente, que quema nuestra lengua, y provoca una pérdida temporal del sentido del gusto.

 

 

¿Por qué la lengua quemada pierde temporalmente la capacidad de percibir sabores?

 

 

La lengua está compuesta por numerosos receptores de sabor, que son de cuatro tipos diferentes:

papilas gustativas para detectar el sabor dulce, ácido, salado y amargo.

 

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Cuando son sobreestimuladas por comida demasiado caliente, quedan insensibilizadas temporalmente, pues su equilibrio químico interno ha sido roto, y hasta que no lo recuperan, no pueden volver a desarrollar de nuevo su función.

 

 

Formas de acelerar la recuperación de la lengua quemada

 

Masticando un trozo de pan, o bebiendo de forma lenta una bebida tibia conseguimos aliviar la quemazón de la lengua. Bebidas excesivamente frías o incluso hielo aplicado de forma directa no son un remedio eficaz, pues sobreestimularán la lengua ya lastimada, y no recuperará su función.

Una posibilidad es echar el hielo en la bebida, y beber poco a poco. Y para la próxima tener más cuidado.

 

Si la quemadura ha sido tan fuerte que la lengua ha quedado roja y rugosa, y con mucho dolor, es conveniente realizar algunos tratamientos caseros para acelerar la recuperación y evitar posibles complicaciones:

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Agua salada o agua oxigenada:

 

Un poco de agua salada templada sirve para matar a los microorganismos que puedan aprovecharse de la quemadura en la lengua, y así evitar una posible infección. Para ello se echa una cucharada sopera de sal común o de mesa, en un vaso de agua templado, y se van dando sorbos, enjuagándo con ellos la boca, especialmente la lengua. Después se escupe y se repite con otro sorbo, hasta vaciar el vaso.

 

Se puede hacer lo mismo con agua oxigenada de farmacia, diluyendo una cucharada sopera en medio vaso de agua, enjuagándose la boca, y sin tragárselo.

 

 

Agua fría, hielo y helados.

 

Si mojas la lengua con agua fría, o bebes agua fría poco a poco, notarás alivio de la quemazón. También puedes chupar un hielo, pero antes de meterlo en la boca, mójalo con agua, para que no se quede pegado a la lengua. También puedes comer helados.

 

 

 

A tener en cuenta

 

La lengua quemada suele quedarse seca con mucha frecuencia, por lo cual es adecuado beber agua con más frecuencia de lo habitual, o tomar caramelos o chicles, para favorecer la salivación.

Una forma de aliviar rápidamente el dolor, es colocando un poco de miel por encima de la lengua.

 

Mientras la lengua aún no esté curada, no es conveniente hacer que tenga que esforzarse en trabajar mucho, por lo cual es conveniente evitar las comidas excesivamente picantes o saladas.